GENES Y HERENCIA

BIOLOGÍA Y GEOLOGÍA

2. GENÉTICA MENDELIANA

La genética mendeliana o genética clásica hace referencia al estudio de caracteres fenotípicos sencillos, a partir de los cuales se deducen los genotipos. Gregor Mendel (1822-1884) fue un monje agustino que realizó numerosos experimentos en su monasterio de Brno (República Checa). Sus trabajos fueron publicados en 1866, pero tuvieron muy poca difusión. En 1900, tres investigadores (Correns, de Vries y Tschermak) llegaron a las mismas conclusiones que Mendel, redescubrieron sus trabajos y lo colocaron en el puesto de ‘padre de la genética’ que ocupa hoy en día. Los trabajos de Mendel no sólo son importantes por la revolución que representaron sus resultados en biología, sino también por el rigor y el enfoque estadístico que dio a sus experimentos. De todos sus trabajos, los más famosos e importantes son los que realizó con plantas de guisante (Pisum sativum). Mendel eligió siete caracteres para estudiar: color y forma de las semillas, color y forma de las vainas, color y posición de las flores y longitud del tallo. Todos eran caracteres cualitativos, con dos alternativas claras. Ese fue una de las claves de su éxito. Para empezar, Mendel obtuvo razas puras para cada carácter mediante la autofecundación de las plantas durante varias generaciones. Seguidamente hizo miles de cruces entre las plantas de raza pura y analizó matemáticamente los resultados. Fue de Vries, uno de sus codescubridores, el que primero expuso los resultados de Mendel en forma de leyes.

PRIMERA LEY DE MENDEL

La primera ley de Mendel o ley de la uniformidad de la primera generación filial establece que, al cruzar dos razas puras para un determinado carácter, todos los descendientes son iguales entre sí. El fenotipo de los descendientes es igual al de uno de los progenitores y es el carácter dominante. Hoy se interpreta como el cruce de individuos homocigóticos que ocasiona una descendencia de individuos todos heterocigóticos. Es un tipo de herencia dominante.

SEGUNDA LEY DE MENDEL

La segunda ley de Mendel o ley de la segregación de los caracteres en la 2ª generación establece que al cruzar dos de los híbridos obtenidos en la primera generación, los caracteres se separan y aparecen en la segunda generación. Los individuos de la F 2 aparecían en proporción 3:1, es decir, 3/4 eran de carácter dominante y 1/4 de carácter recesivo. Esto indica que los individuos de la F 1 son híbridos, pero sólo expresan un carácter, el dominante. Actualmente se interpreta como una separación de cromosomas a la hora de formarse los gametos. Cada alelo va en un cromosoma y acaba en uno sólo de los gametos. Esta ley sólo se cumple en herencia dominante.

TERCERA LEY DE MENDEL

La tercera ley de Mendel o ley de la herencia independiente de los caracteres sostiene que los caracteres diferentes se transmiten de forma independiente. Para establecer este resultado, Mendel realizó cruces entre plantas puras para dos caracteres y observó las dos primeras generaciones. La F 1 cumplía la primera ley y eran todos iguales, con los dos caracteres dominantes. Eran dihíbridos. En la F 2 , en contra de lo esperado, aparecieron todas las combinaciones posibles entre los dos caracteres, en una proporción: 9:3:3:1. Esta ley se sabe actualmente que sólo se cumple en casos particulares.
Para ir a donde no se sabe hay que ir por donde no se sabe.” San Juan de la Cruz “It must be a strange world not being a scientist, going through life not knowing--or maybe not caring about where the air came from, where the stars at night came from or how far they are from us. I WANT TO KNOW” Michio Kaku “Nullius in verba” Robert Boyle, Christopher Wren y Robert Hooke